Con mucha expectativa empezó la nueva era del Chelsea de Lampard con un mal partido pero con mucha efectividad, ante un débil Brighton.
Frankie paró a su equipo con un 4-4-2 clásico, con un ataque alemán, Havertz y Werner, nuevas incorporaciones de los ‘Blues’ arrancaron y tuvieron un partido disímil. Buen estreno del ex Leipzig que se adaptó más rápido a la dinámica de la Premier League.
Los locales jugaron muy mal, flojísimos en defensa y ataque, si siguen así, pelearán el descenso sin lugar a dudas. Un error en la salida de balón de los ‘Seagulls‘ fue aprovechado por Werner para provocar un penalti que acabó en el primer gol del partido.


Timo Werner ante el portero Ryan. Fuente: Chelsea FC
En la segunda mitad, The Albion empató rápido, pero al minuto James puso el segundo. El tercero llegó en una acción a balón parado con algo de fortuna, Zouma remató tras centro de James y su disparo lo desvió un rival.
Havertz, estuvo opaco en la mayoría de sus acciones y le costó mucho entrar en juego. En defensa, el equipo volvió a mostrar la misma fragilidad de la temporada pasada, y por si esto fuera poco, Kepa, que pudo hacer más en el gol de Trossard, vuelve a generar dudas en la portería.
Con una inversión de 223 millones de euros, los hinchas y el propio Roman Abramovich, esperan una mejor performance. Recién ha empezado la liga, pero Lampard debe encontrar pronto su mejor equipo. La próxima parada será frente al campeón, Liverpool, el domingo. Dura prueba para los ‘Blues’ .