Los africanos dieron el golpe en su zona superando a los amplios favoritos para clasificar, el último subcampeón y el tercero de Rusia 2018. A los europeos no les sobra nada en una competición sui géneris con varios batacazos que han dejado anonadado al planeta fútbol. Marruecos es una de esas lindas sorpresas que brindan las Copas del Mundo.
Sólo faltaba que los liderados por Ziyech, En-Nesyri y Hakimi rubriquen su clasificación frente al peor del grupo, Canadá, que llegó con muchos bombos y platillos, y se despidió con cero puntos, mostrando que aún es un equipo en formación. Los ‘Leones del Atlas’ hicieron su tarea, no solo avanzando al top 16 del torneo, sino quedando líderes del Grupo F… con justicia.
Los goles de Ziyech y En-Nesyri en la primera parte fueron suficiente para alcanzar el objetivo de verse, 36 años después, en octavos de final con buen juego, orden táctico y con punche arriba (4 goles en tres partidos). El equipo de Walid Regragui es cosa seria, un duro escollo que encontrará el segundo del loco Grupo E (Alemania, Costa Rica o Japón).
Es la segunda vez que Marruecos se planta en octavos de final de un Mundial (en seis apariciones) y lo hace tras sumar un empate y dos victorias. Si en México 86 cayeron por la mínima ante Alemania Federal (finalista del certamen), los ‘leones del Atlas’ quieren seguir rugiendo en esta copa con buenos futbolistas jugando en la élite del balompié. Soñar no cuesta nada… y los marroquíes quieren seguir haciéndolo en Qatar 2022.