La historia de Koeman y Joaquín en el Valencia acabó mal. Mañana, estos dos personajes se vuelven a ver las caras.
El Barcelona recibe este sábado al Real Betis por la novena jornada de LaLiga y que tendrá su atención en dos personajes que no se veían hace 12 años. Ronald Koeman y Joaquín Sánchez.
A inicios de octubre del 2007 el neerlandés fue elegido como sucesor de Quique Sánchez Flores en el banquillo del Valencia. Entre sus dirigidos se encontraba el gaditano, en ese entonces, un fichaje que significó 25 millones de euros una temporada atrás. Nadie preveía que su relación terminaría de la peor manera.


Todo comenzó con un castigo del entrenador hacia el jugador por haber llegado tarde a un entrenamiento. Lo sacó de un partido. Un caso similar vivió Ever Banega, pero a diferencia de Joaquín, no tuvo ninguna reprimenda.
Koeman y la ‘vieja guardia’ valencianista
Algo que caracterizo a la corta era que tuvo Koeman con los che fue que sacó del equipo a varios jugadores importantes. Como Santiago Cañizares, David Albelda o Miguel Ángulo. Este último, de la misma posición que el sevillano, pero el holandés prefirió darle titularidad a un joven Javier Arizmendi.


Su relación con ellos, y otros veteranos con Vicente, era algo que incomodaba a Koeman, que haría mostrar su evidente desagrado por el hoy jugador bético en la final de la Copa del Rey 2008.


Valencia se enfrentaba con el Getafe en el Vicente Calderón de Madrid. El partido fue peleado y terminó con triunfo valencianista por 3 a 1, pero la nota del la noche fue ver a Joaquín entrenando desde antes del fin del primer tiempo y en la segunda parte, pero sin llegar a ingresar. La gota que derramó el vaso.
Solo seis días después de obtener la copa, el Valencia destituyó a Koeman y todo fue volviendo a la normalidad. La ‘vieja guardia’ regresó a los entrenamientos bajo la provisional dirección técnica de Voro hasta el fin de ese curso.
Tiempo después, el entrenador neerlandés tendría palabras nada positivas sobre Joaquín. «Es un jugador de 25 millones que no vale ni 25 euros», dijo. Por su parte, el gaditano aludiría que su ex técnico paraba más pendiente del vino que de otra cosa. «De lo único que se preocupaba era de tener cinco o siete botellas en la cena», sostuvo en alguna oportunidad. Este sábado se espera un buen partido, pero no un apretón de manos entre ellos.