FIA y una grave acusación a Red Bull Racing

Ha iniciado una investigación seria contra RB por estar utilizando un mecanismo que permitiría ajustar la altura del coche entre la clasificación y la carrera.
Redacción Tiro Directo

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La FIA ha iniciado una investigación seria contra Red Bull, el equipo que compite con Max Verstappen y Sergio Pérez, tras la reciente controversia surgida en el GP de Singapur. Si se determina que el equipo ha violado las reglas, podría enfrentarse a sanciones muy severas. Esta investigación se desencadenó por una denuncia que alega que el equipo austriaco dispone de un dispositivo que les permite modificar la altura del coche durante el parque cerrado, lo que les brindaría una ventaja aerodinámica significativa.

Trucos parecidos

Este no es el primer caso en el que la FIA ha dirigido su atención a prácticas sospechosas en la Fórmula 1. En la temporada 2024, la organización ya había investigado a McLaren por la flexibilidad de su alerón trasero, que generaba un efecto similar al DRS. En esa ocasión, McLaren tuvo que realizar modificaciones en su monoplaza. Ahora, el foco se ha trasladado a Red Bull, que ha sido señalado por los comisarios de la FIA antes del próximo Gran Premio de Estados Unidos.

¿Red Bull rompe reglas?

La denuncia específica es que ‘RB‘ podría estar utilizando un mecanismo que permite ajustar la altura del coche entre la clasificación y la carrera, una maniobra prohibida por el reglamento. Según las normas, solo se permite ajustar el ángulo del alerón delantero entre estas dos sesiones. El artículo 40.2 b) i del Código Deportivo de la F1 establece que «la configuración aerodinámica del alerón delantero puede ajustarse utilizando las piezas existentes». No se pueden añadir, quitar o reemplazar piezas». Asimismo, el artículo 40.9 b) estipula que cualquier modificación a los sistemas de suspensión o la configuración aerodinámica del coche, excepto el alerón delantero, está prohibida en el parque cerrado.

El equipo ha confirmado que ha realizado cambios en su monoplaza después de mantener conversaciones con la FIA. Según el periodista Andrew Benson de la BBC, los equipos rivales alertaron a los comisarios sobre un posible dispositivo en los monoplazas de Red Bull que permite modificar la altura de la carrocería, lo que podría violar las regulaciones de parque cerrado.

El supuesto haz bajo la manga

Este dispositivo, conocido como ‘babero’, se refiere a la parte delantera del suelo del coche, que puede ser ajustada. ‘RBR’ ha declarado que, aunque el dispositivo existe, es inaccesible una vez que el coche está completamente montado y listo para circular. Un portavoz del equipo ha afirmado que, en la correspondencia mantenida con la FIA, se ha acordado un plan para avanzar en la situación, subrayando que se trata de un mecanismo destinado a facilitar ajustes cuando el coche está desmontado, y no para obtener ventajas durante el parque cerrado.

Con este escándalo estallando en Austin, la presión sobre Red Bull está aumentando. Si se comprueba que han utilizado este dispositivo para manipular la altura del coche de manera ilegal, las repercusiones podrían ser significativas, no solo para el equipo, sino también para los pilotos involucrados, en un momento crucial de la temporada. La comunidad de la F1 espera con expectación el desenlace de esta investigación, que podría alterar el panorama competitivo de la temporada.