Los de Gelsenkirchen no han logrado revertir su presente caótico y con cuatro entrenadores cesados, apelan a un milagro para seguir en la elite alemana.
El Schalke 04 vive la que es con seguridad su peor temporada en la 1. Bundesliga, con una campaña para el olvido en el que está seriamente comprometido con el descenso al conseguir solo un triunfo en 23 partidos y contar con cuatro entrenadores ya despedidos y sin confirmar quien será el quinto que apelará a un milagro para conservar a los de Gelsenkirchen en primera.
Pero esta crisis no es reciente. Cabe recordar que al mando de David Wagner, los ‘Azules Reales’ comenzaron esta sequía de triunfos durante el 2020 que inició el 25 de enero del año pasado y que acumuló un total de 30 partidos sin conocer la victoria en la liga alemana que acabó el 9 de enero con el triunfo ante el Hoffenheim.
Wagner fue el primer cesado. El 27 de setiembre del 2020 lo despidieron por el que sería el común denominador en sus predecesores. Los malos resultados. Christian Gross que fue el último en asumir hasta ahora, fue aquel que le dio su única victoria en lo que va de temporada liguera, pero de ahí solo dos puntos consiguió, además de la humillación en el Derbi del Ruhr, cosas que no se suelen perdonar tanto en Gelsenkirchen como en Dortmund.
La prensa alemana especula que el actual entrenador del Darmstadt, Dimitrios Grammozis, será el elegido para intentar remontar en estas once fechas restantes el destino de los ‘Mineros’, que afrontarían su cuarta campaña en la 2. Bundesliga de consumar su descenso.
Historia repetida
El Schalke 04 perdió la categoría en las temporadas 1980-81, 1982-83 y 1987-88. En la primera llegó a la fecha 23 con 16 puntos (en esa época la victoria solo valía dos puntos) y la acabó con 23 unidades, al ganar tres e igualar uno. Fue penúltimo en la tabla y sin chances de permanencia a dos jornadas de acabar el curso.
Tras su rápido ascenso, volvió a vivir un amargo año que a estas alturas lo tenía en el decimoséptimo lugar con 13 puntos, aunque esta vez daría más pelea al conseguir cuatro victorias y un empate en el tramo final, pero insuficientes para alcanzar al Eintracht Braunschweig con 27 unidades, cinco más que los de Gelsenkirchen.
La última vez que perdió la categoría fue hace 33 años, un 14 de mayo se fue a la segunda división tras caer en la fecha 32 ante el FC Köln por 3 a 1. Esa campaña a diferencia de la actual, se encontraba afuera del descenso en la jornada 23, pero al final culminó en el último puesto con 23 puntos tras ochos victorias y siete empates.
El Schalke tiene en sus manos su salvación, al tener todavía que enfrentar en los próximos partidos a sus rivales directos por la baja. Empezará como local ante Mainz 05 el próximo viernes, luego en la fecha 30 visitará al Arminia Bielefeld, después recibirá al Hertha Berlin y cerrará la temporada con su visita al Köln.
A los pesos pesados ya no los tendrá que ver, pero sí a duros rivales como el Wolfsburg, Borussia Mönchengladbach y Bayer Leverkusen, equipos que también necesitan ganar si quieren estar en la próxima Champions League. Para los ‘Mineros’, eso está lejos de darse y para sus hinchas ahora más que nunca vale que mueran de pie en lo que resta de Bundesliga.