Newcastle y Everton empataron a uno por la fecha 31 de la Premier League. El St. James’ Park era testigo de la victoria de su equipo hasta el minuto 88′, cuando se ahogaron las esperanzas. El empate sabe a poco para ambos al tener en cuenta sus aspiraciones: meterse a Europa la próxima temporada y salvar la categoría.
El partido se antojó redondo para los locales. Las »Urracas» se adelantaron temprano con una cabalgada individual de Alexander Isak. El sueco picó al espacio tras un balonazo largo y logró pisar área. Dibujó a los defensores en dos baldosas para rematar de derecha al palo más lejano de Pickford. Todo sobre los 15′ del primer tiempo.
El dominio de los de Eddie Howe se hizo notar. Casi sobre la hora de partido, una jugada preparada a balón parado encontró red en los pies de Dan Burn. El central empujó el balón y corrió a celebrar el tanto. Sin embargo, el gol sería anulado por el VAR. La revisión evidenció un clarísimo fuera de juego. El encuentro se partió y Everton tomó la lanza.
La visita no bajó los brazos y fue a buscar el resultado. Bombardearon el área rival de centros, donde los de blanco y negro apretaron los dientes para aguantar el resultado. Y la insistencia dio frutos. Una falta grotesca de Paul Dummett sobre Ashley Young fue señalada como penal. En el minuto 88′, Dominic Calvert-Lewin pasaba a empatar el partido.
Un resultado incoloro
El empate sabe a poco para ambos. Newcastle tuvo la victoria en el bolsillo y pudo seguir sumando unidades en su búsqueda de meterse a competiciones europeas. El punto lo deja aún por debajo del West Ham en el octavo lugar. El presente de »The Toffees» es todavía más complicado: no han podido ganar en sus últimos 13 partidos disputados. Hoy miran el descenso apenas cuatro puntos arriba de la zona roja.