En el peor partido de la era Pirlo, el atacante español cabeceó un centro de Cuadrado al 92′ para meter a la ‘Vechia Signora’ en octavos de final de la Champions League.
El crédito de Andrea Pirlo en la banca de la Juventus se acorta con el pasar de las fechas. Hoy el conjunto bianconero ganó su partido de Copa de Europa, por dos individualidades que voltearon el marcador final: Cristiano Ronaldo y Álvaro Morata fueron los goleadores para el club piamontés.
A lo largo de los 94 minutos de partido jugado en el Juventus Stadium, ante un débil pero ordenado, Ferencvaros de Hungría, el equipo comandado por CR7 fue una lagrima en todas sus líneas. En ataque, Paulo Dybala, se estrenó como capitán pero volvió a jugar en un nivel paupérrimo. Él y Federico Bernardeschi, nunca influyeron a la hora de la creación de juego. En todo momento estuvieron desconectados de la línea de centrocampistas: Arthur, Mckennie y Bentancur.
El equipo visitante sorprendió a Szczesny en una de las contras que tuvo, Ngue robó un balón en el centro del campo y tras una larga carrera, puso un pase para que Myrto Uzuni la mande al fondo del arco al 19′. Los dirigidos por Pirlo presionan arriba pero quedan muy mal parados en el retroceso, perdiendo constantemente las espaladas la línea de volantes en casi todas las contras.
En el minuto 33 de partido, Cristiano marcó un gol en fuera de juego pero el ‘Bicho’ ya avisaba. Hasta que un minuto después el portugués, fuera del área, sacó un zurdazo al palo izquierdo imposible para el portero húngaro. 1-1 que salvó del ridículo a los bianconeri en el primer tempo.
Para el segundo acto, la Juve salió los primeros minutos de juego con otra actitud, pero se fue diluyendo con el pasar de los minutos. Se chocaron contra un equipo ordenado atrás y rápido en las transiciones de defensa para ataque. La primera clara llegó en el 59′, cuando Bernardeschi sacó un disparo cruzado que impactó en el palo. No era la noche de los campeones de Italia.
Hasta que al minutos 62 entró Morata por un deslucido Dybala, desde el ingreso del español, los juventinos mejoraron sustancialmente a la hora de romper a la férrea defensa húngara. Al minuto 77, tras realizar un perfecto desmarque, el madrileño de 28 años estrelló su pelota al palo izquierdo de la portería. Pirlo, Agnelli, Nedved y compañía sudaban frío de nuevo. Veían la clasificación a octavos complicarse de manera increíble.
Sin embargo, con Cristiano en la cancha nunca des un partido por terminado. Los nervios estaban a flor de piel en ambos conjuntos. Daniel Siebert, árbitro del encuentro añadió cuatro minutos para el final. Y no fue el crack portugués el que salvó a la Vecchia Signora, sino Morata al 92′. Cuadrado en la última jugada le ganó la espalda a la defensa contraria y metió un centro al área que cabeceó el ex colchonero con mucha dificultad, el portero húngaro intentó pararla, pero finalmente se le acabó colando entre las manos. Triunfo milagroso para la Juventus y quinto gol de Morata en Champions League.