Este viernes 3 de mayo se confirmó un rumor que sonó fuerte en las últimas semanas y es la no continuación del ahora ya histórico Marco Reus en las filas del Borussia Dortmund para la próxima temporada. El delantero que arribó en 2012 se marchará sin poder ganar una Bundesliga, pero lo podría hacer con un título europeo en Wembley.
A través de un video en las redes sociales aurinegras donde se le ve al otrora capitán y detrás de él la mítica ‘Gelbe Wand’ o muro amarillo, el ex internacional con la selección alemana confirma que llegó a un acuerdo mutuo con su club para culminar su relación en junio próximo.
«Estoy increíblemente agradecido y orgulloso de este momento especial en mi club, el Borussia Dortmund. He pasado más de la mitad de mi vida en este club y he disfrutado cada día, aunque, por supuesto, también ha habido momentos difíciles. Ahora ya sé que me resultará difícil decir adiós al final de la temporada y, sin embargo, estoy feliz de que ahora haya claridad y de que podamos centrarnos plenamente en los partidos finales muy importantes que aún nos quedan por jugar. Tenemos un gran objetivo en la mira que todos queremos lograr juntos. Para lograrlo, necesitaremos a cada uno de nuestros increíbles fanáticos, a quienes me gustaría expresar mi más sincero agradecimiento por su increíble apoyo a lo largo de los años«, manifestó.
Al cuadro de Edin Terzić le queda por delante la vuelta de semifinales ante el Paris Saint Germain con la serie ligeramente a su favor por el triunfo de 1 a 0. Para Reus sería quizás, un premio consuelo alzar la orejona después de no conseguir su principal objetivo que era la ‘Meisterschale’.
Reus y una vida atada al BVB
Nacido el 31 de mayo de 1989 en Dortmund, ‘Woody’, como le apodaron por su delgada figura similar a la del personaje de Toy Story, se formó en la inferiores de los ‘Schwarzgelb’, pero esa condición física no le permitió quedarse y encontró sitio en un club cercano, el Rot Weiss Ahlen.
Con el RWA logró un ascenso de la 3. Liga a la 2. Bundesliga en su primera campaña en 2007-08 y en la siguiente cumplió un buen papel que le valió para ser fichado por el otro Borussia. El de Mönchengladbach. Ahí, todavía con una delgada complexión, se hizo notar y el BVB no lo ignoró. Lo fichó en 2012 por 18 millones de euros.
Tras el regreso a su casa, de inmediato funcionó a la perfección en el esquema de Jürgen Klopp y se asoció muy bien con dos nombres, el de Mario Götze y Robert Lewandowski. Este tridente fue artífice de la temporada 2012-13 que llegó a la final en Wembley, pero que no pudo ante el poderoso FC Bayern de Jupp Heynckes.
Lesiones, capitanía y la frustración en Bundesliga
Su paso por Dortmund no llegó a ser más exitoso debido a las múltiples lesiones que sufrió, principalmente que lo privaron de jugar el Mundial del 2014 en la que ya estaba considerado en lista, la Euro 2016 y el Mundial del 2022. En total, desde 2012 sumó 62 lesiones, por lo que se ausentó de 213 partidos y sumó 1269 días sin actividad.
Mientras el rechazó ofertas de otros clubes, él se quedó, pero veía como varios compañeros se iba. En 2016 luego de la partida de Mats Hummels al cuadro bávaro, Reus se convirtió en el capitán y con ello llegó su primer gran éxito: la DFB-Pokal 2016-17. Conseguiría otra en la 2020-21 en la época de pandemia y con ello el último título importante del ‘Schwarzgelb’.
Pero la ensaladera de la Bundesliga siempre le fue esquiva. En 2018-19 estuvieron cerca al dominar el torneo por varios meses y perderlo en el tramo final y la campaña pasada con el fatídico empate ante Mainz 05 y el título perdido por diferencia de puntos con el Bayern.
Ahora, con un quinto lugar en la tabla y con la chance de jugar una nueva final europea, Marco Reus y el Borussia Dortmund podrían cerrar una linda historia de 12 años con 415 encuentros, 168 goles y 116 asistencias, con una Champions League, la segunda del cuadro aurinegro.