Los ‘Reds’ estuvieron atentos a los errores de los alemanes y con dos estocadas domaron a los ‘Toros Rojos’ en Budapest.
En el inicio de la fase de octavos de final de la Champions League, el Liverpool que por motivos de emergencia visitó al Leipzig en Budapest, Hungría, sacó una importante ventaja de cara al partido de vuelta al imponerse por 2 a 0 en dos jugadas puntuales donde los alemanes fallaron.
Los locales que tuvieron que llevar el partido al Puskas Arena por las restricciones de vuelos provenientes de Inglaterra en tierra germana, se presentaron con un equipo que apelaba a la velocidad y la sorpresa. A los dos minutos ya avisaba con un cabezazo de Dani Olmo que tocó en la base del palo derecho.
De a pocos el partido se igualó en propuesta, pero las ocasiones más claras las tendrían los pupilos de Jürgen Klopp. A los 31′ Andrew Robertson intentó sombrear desde lejos a Peter Gulacsi y cuatro minutos más tarde los ‘Reds’ marcaron, pero el tanto se anuló porque en la jugada previa el balón había salido del campo. Con la igualdad a cero se fueron al descanso.
Al inicio del complemento Christopher Nkunku tuvo una clara que fue bien tapada por Allison Becker y en el 53′ llegó el primero de los ingleses luego de un error de Marcel Sabitzer que al jugar para atrás la pelota se la regaló a Mohamed Salah que no falló ante el meta húngaro.
Cinco minutos después la defensa del Liverpool rechazó una pelota de su área y cuando parecía que la jugada no representaba mayor peligro, Nordi Mukiele erró en el despeje que le permitió a Sadio Mané coger el esférico, conducir y poner el segundo que abofeteó la moral de lo sajones.
Claramente afectado, Julian Naggelsmann mandó al campo a Yussuf Poulsen y Hwang Hee-chan para darle más peso a su ataque, pero la visita estuvo implacable pese a sus ausencias defensivas y mantuvo a cero su pórtico que le permitirá afrontar la vuelta en Anfield con la tranquilidad de tener el resultado a su favor.
Ingleses y alemanes se volverán a ver las caras el próximo 3 de marzo.