El Liverpool llegó a los cuartos de final de la Europa League, siendo uno de los mejores equipos de la temporada. Sus buenos resultados y sobre todo, su buen juego los posicionaron como uno de los máximos candidatos a llevarse no solo esta competición, sino también la Premier League. El Atalanta por su parte, no viene siendo muy regular.
Sin embargo, esto es futbol y una vez más nos sorprendió a todos. Por la seguidilla que se viene y aprovechando que jugaban en Anfield, Jurgen Klopp tomó la decisión de rotar el equipo. Una decisión que le costó bastante caro. Los locales no estaban nada precisos y les costaba mucho el retroceso. Antes de que culmine el primer tiempo, Gianluca Scamacca lograría anotar el primer gol del encuentro para la visita.
Fue tanto el descontento de Klopp con el rendimiento de sus jugadores, que salió a jugar el complemento con tres cambios. Ingresaron Salah, Robertson y Szoboszlai. Los ‘reds‘ recuperaron la tenencia de la pelota, pero no lograban hacerle daño al rival. Sus problemas seguían siendo defensivos. Retrocedían muy mal y los de Gasperini lo aprovechaban.
Minutos más tarde, el delantero italiano firmaría su doblete, dejando en shock a más de uno. El Liverpool mandaría todo su arsenal al ataque, en busca de descontar el marcador. Ingresarían Luis Diaz y Diogo Jota, pero seria en vano. Sobre el final, Mario Pasalic se encontraría con un rebote, gracias a una nueva contra de los de Bérgamo y sellaría el 3-0 final.