Fallece O.J. Simpson, leyenda de la NFL y protagonista del ‘Juicio del Siglo’

La polémica vida del icónico exjugador de fútbol americano llegó a su fin por un cáncer de próstata. Su legado, complejo y controvertido fuera de las canchas, fue llevado al cine y premiado con un Óscar.
Redacción Tiro Directo

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O.J. Simpson, cuyo nombre completo es Orenthal James Simpson, falleció hoy, dejando atrás una vida llena de éxitos deportivos enturbiada por controversias y acusaciones legales. Nacido el 9 de julio de 1947, en San Francisco, California, Simpson creció para convertirse en una figura destacada en el mundo del deporte y el entretenimiento. Con una altura imponente de 1,85 metros, su presencia en el campo de juego era innegable.

Comenzó su carrera deportiva en la Universidad del Sur de California, donde su velocidad y habilidad como running back lo convirtieron en una estrella destacada. En 1969, ‘Simpson ‘Simp’ dio el salto al profesionalismo al unirse al Buffalo Bills de la Liga Nacional de Fútbol. Con ellos, dejó una marca imborrable, convirtiéndose en el mejor corredor de la NFL en la temporada de 1972.

Logró hazañas impresionantes, como avanzar más de 2.000 yardas en una sola temporada en 1973 y establecer un récord de 23 touchdowns en 1975. Tras su exitoso paso por los Bills, continuó su carrera en los San Francisco 49ers antes de retirarse del fútbol profesional en 1979.

Sin embargo, la vida del americano estuvo marcada por tragedias y controversias. En 1994, fue acusado del brutal asesinato de su ex esposa, Nicole Brown Simpson, y el camarero Ronald Goldman. A pesar de un juicio muy publicitado en el que fue absuelto de los cargos penales, fue hallado responsable en un juicio civil y condenado a pagar una suma considerable en daños.

Su vida más allá del fútbol americano

Además de su carrera en el deporte, Juice incursionó en el mundo del entretenimiento, apareciendo en películas como «The Klansman«, «Killer Force» y «The Naked Gun«. Su vida personal estuvo marcada por múltiples matrimonios, incluyendo su unión con Marguerite Whitley y Nicole Brown Simpson, con quienes tuvo varios hijos.

Tristemente, su legado deportivo se vio empañado por sus problemas legales, incluido un arresto en 2007 por delitos que incluían robo a mano armada y secuestro, lo que llevó a su condena en 2008 a 33 años de prisión. En 2017, fue liberado bajo libertad condicional.

La vida de O.J. Simpson estuvo llena de triunfos y tragedias, dejando un legado complicado que sigue siendo objeto de debate y especulación. Su fallecimiento hoy cierra un capítulo en la historia del deporte y la cultura popular.