Carrusel de emociones y dramatismo se vivió en el cierre de la 2. Bundesliga porque faltaba conocer al segundo equipo que ascendía a la máxima categoría y al que jugaría la relegación. El Heidenheim que lo perdía 0-2 lo dio vuelta al noveno minuto del adicional y con ello dejó al Hamburger SV obligado a jugarse otra vez la vida en el Playoff.
Para la fecha 34 los rojiazules llegaban con 64 puntos y los del puerto con uno menos. Heidenheim incluso tenía la chance de ser campeón si ganaba y el Darmstadt caía en su visita a Greuther Fürth.
El Hamburgo no tuvo mayores problemas ante el Sandhausen, cuadro que ya estaba descendido, pero solo el Jean-Luc Dompé se hizo presente en el marcador en los 90 minutos, suficiente para cumplir su parte.
Durante el partido se escuchó en las gradas celebrar a la hinchada de los ‘Dinosaurios’ porque en el partido que les importaba, el otro descendido, Jahn Regensburg vencía 2 a 0 con dos tantos de Prince Owusu en un lapso de cinco minutos, pero la respuesta de Heidenheim fu rápida y pese a no tener un buen partido empezó a apretar.
En el 58′ Benedikt Saller cometió un autogol y cuando el partido de Hamburgo ya había acabado, en el 90+3′ llegó el empate por un penal convertido por Jan-Niklas Beste. El Jahn intentó aguantar, pero de un error en salida nació el tercer agónico gol de Tim Kleindienst al 90+9′, lo que le daba al equipo de Baden-Wurtemberg el título por la derrota de Darmstadt, además del primer ascenso a la 1. Bundesliga en su historia.
Los hinchas del Hamburgo que habían invadido la cancha del Sandhausen, se quedaron sin reacción tras haber celebrado de manera anticipada. El Playoff será ante el Stuttgart en una serie de ida y vuelta que iniciará el próximo jueves en el Mercedes Benz Arena y concluirá el lunes en el Volksparkstadion.
