Para no olvidar. Bayer Leverkusen goleó al Werder Bremen en casa para quedarse con la primera Bundesliga de su historia. Un recital: cinco goles, un hack-trick, la tribuna a la cancha y la alegría de Xavi Alonso fueron parte del espectáculo. Por primera vez en casi 120 años de historia, Leverkusen se queda con el máximo título del fútbol alemán.
La fiesta arrancó temprano para los locales. La hinchada se hizo presente en los alrededores del BayArena para recibir a su equipo. Y el plantel respondió en el verde: el marcador lo inauguró Victor Boniface por la vía penal. Sobre los 25‘ minutos, los de negro y rojo ya acariciaban el título.
El recital continuaría en el segundo tiempo en los pies de Granit Xhaka. El volante soltó un trallazo de media distancia para colocar el segundo del encuentro. Zurdazo mortal desde fuera del área para quemar la portería de Zetterer.
Pasada la hora de partido, Florian Wirtz continuó con los bombazos de fuera del área. El delantero encontraría red hasta en tres ocasiones: derechazo a la escuadra en el 68‘ y de contra a toda velocidad en el 83‘. La locura se desataría en los descuentos cuando Wirtz firmó su hack trick y el quinto tanto del encuentro. Las tribunas se vinieron abajo para el festejo de toda una ciudad. El árbitro no tuvo más remedio que pitar el final. Bayer Leverkusen era finalmente campeón a falta de cinco fechas por jugar.
La ‘Xavineta’ en racha
Alcanzado el título, el equipo de Xavi Alonso acumula 43 partidos invicto y se convierte en el ‘‘nuevo campeón» de las cinco grandes ligas de Europa. El último equipo en lograrlo había sido el Wolfsburgo en 2009.